Siempre tenemos la idea de que la justicia es un poco arcaica e inmovilista. Hoy me ha sorprendido una iniciativa original ideada por el juez del caso Taula , el magistrado Víctor Gómez.
El origen está en la decisión de proponer a doña Rita Barberá declarar ,de forma voluntaria ,en el plazo de 20 días siendo una persona aforada. ¿Cómo lo ha conseguido el juez?
Las señora Barberá como senadora no puede ser ni investigada en ningún proceso. Para que vaya a declarar tiene que citarla el Tribunal Supremo previo suplicatorio al Senado.
¿Qué solución se le ha ocurrido al magistrado para poder avanzar en el“Taula Gate”? Pues apoyarse en el artículo 118 de la nueva ley de enjuiciamiento criminal y crear una figura que yo llamo del “cuasi-investigado”
Ahí va mi reflexión:
El magistrado le atribuye un hecho punible a la señora Barberá y desde ese momento se pone en marcha el derecho de defensa. Para arrojar luz en el proceso, el magistrado necesita más datos. Y le propone una forma diferente de declarar. Si pudiéramos hacer un símil, sería algo así como dar una rueda de prensa sin posibilidad de preguntas, con un solo periodista: el juez Gómez.
La ventaja para la senadora al aceptar este ofrecimiento, es que ya puede conocer todos los datos del sumario Taula, incluso las escuchas telefónicas . Ella, en veinte días contará lo que desee, pero con conocimiento absoluto de causa.
Mi conclusión:
Si yo fuera el letrado de la señora Barberá, también le aconsejaría que declarase. Fundamentalmente por la imagen positiva que este gesto generaría en la opinión pública.
Me aventuro a adelantar, que en breve, y en cuanto existan los indicios necesarios, la señora Barberá pasará a engrosar la lista de investigados por el “Taula Gate”. Al menos y en mi opinión, todo apunta en esa dirección.
¿Creéis que esta iniciativa será del agrado del resto de los jueces?
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